Image Image Image Image Image Image Image Image Image Image
Scroll to top

Top

miércoles 3 de diciembre de 2014

La encrucijada del Kirchnerismo

La encrucijada del Kirchnerismo

Siguiendo la ‘calidad’ de las noticias habidas en estos días, puede inferirse que éstas podrían promover, en algún momento no muy lejano, un derrumbe implosivo inesperado para el gobierno, a causa de ‘trivialidades’ (¿) que se tornan cada vez más dañinas para sus principales figuras

En efecto, si la investigación del Juez Bonadío sigue con el mismo ritmo sostenido de hoy, podría significar para Cristina y sus hijos -y Lázaro Báez y los suyos-, una caída de su impunidad “por la retaguardia”, con alguna similitud al caso del otrora intocable Al Capone de los años 30 en Chicago. Un miembro de la mafia acusado durante años ante la justicia de su país por múltiples delitos, que terminó cayendo por una evasión tributaria insignificante, que abrió la puerta a la ampliación de cargos, condena final y confinamiento en el célebre penal de Alcatraz.

Esto ha comenzado a causar mucho temor al gobierno según se aprecia en el nerviosismo de su contraofensiva “a mansalva”, que solo aumenta la silenciosa sensación generalizada de su culpabilidad.

Por otra parte, el partido Justicialista, aliado hasta ahora con Cristina para proteger su propio pellejo, comienza a dar muestras de “desalineamiento”, al punto que el gobernador de Córdoba de la Sota, ha dicho sin ambages en estos días que el kirchnerismo es una “deformación” (sic) del peronismo.

El ejercicio del poder por mucho tiempo, ha dotado a los discípulos más conspicuos del General Perón de una gran experiencia para mantenerse alejados de los tribunales y comienzan hoy a abroquelarse detrás de un candidato que la Presidente detesta: Daniel Scioli.

La primera mandataria, mientras tanto, como un verdadero toro de lidia, no ha tenido peor idea que embestir contra el juez que la investiga por delitos comunes sin pensar en las consecuencias. Olvida que el Poder Judicial es, al fin y al cabo, una “corporación” más, que en los momentos difíciles suele abroquelarse monolíticamente cuando se siente atacado.

Los funcionarios del gobierno, que se supone deberían estar capacitados para pilotear esta crisis, han demostrado ser de “pacotilla” y sus integrantes compiten entre ellos para ver cuál “sopla” mejor en el oído de la Presidente el contenido de sus acertijos, lances y burradas.

No hay nada más cierto que cuando se ha comprobado el vínculo de cada uno de los eslabones de una cadena con los que están más cerca de ellos, eso basta para comprender de qué manera el último está unido al primero, decía Descartes. En este caso, además, porque todos ellos fueron seleccionados por su obsecuencia irrestricta a la “hotelera exitosa”.

Los sindicatos –aliados y rebeldes-, comienzan también a mostrar sus garras y movilizan poco a poco sus huestes más recalcitrantes, haciendo tronar su descontento por cuestiones que, como el impuesto a las ganancias, cuyas alícuotas han quedado desactualizados por la inflación, los despoja de gran parte de sus ingresos, mientras Kicillof y Capitanich, creyéndolos estúpidos, les dicen que dicho impuesto es parte de “un esfuerzo solidario, filosófica e ideológicamente necesario” (¿). Algunos de ellos, verdaderos “expertos” en exacciones, se preguntarán seguramente: ¿para que Máximo pueda seguir construyendo hoteles familiares con la ayuda de Lázaro Báez?

Comienza a crecer la sospecha al mismo tiempo, que el gobierno no estaría dispuesto a acortar el período de negociación y arreglo con los “hold outs” a partir de enero próximo, usando este asunto para mantener en vilo a todo el mundo hasta las elecciones, a la par que continúa “saqueando” el Banco Central y el Anses y dejándole el “mochuelo” al próximo presidente como una forma de conservar su discurso “progresista” (¿).

En ese contexto, ¿será posible que la precaria salud de CFK le permita resistir por mucho tiempo más el asedio de la realidad que hemos descripto sucintamente? ¿Cuál puede ser la salida para ella?

¿Adelantar las PASO? ¿Pactar con la oposición?

Nuestra opinión: nunca como hoy se abre ante nuestros ojos el comienzo del mundo impredecible al que aludía en su obra Víctor Massuh enfáticamente.