Localizado unos kilómetros al sur de Fort Lauderdale, Florida, en el área de Hollywood, el resort de golf del Westin Diplomat es una propiedad que pertenece a la Luxury Collection de la cadena Starwood. Con el Intercoastal Waterway como fondo, esta villa golfística tiene sesenta habitaciones y suites de estilo europeo que incluyen pisos de madera lustrada, muebles de estilo y balcones privados que miran hacia fuentes de roca de coral, patios enredados de Santa Ritas y lagos enmarcados en la flora tropical.

Estas delicias se hallan rodeadas de un campo de golf terminado a mano, con alicates de manicura y equipado con tecnología GPS en los carritos para localizar rápidamente la pelota, saber cuántas yardas hay hasta el hoyo y decidir, así, cuál es el mejor palo para jugar.

Tanto el jugador que hace poco que practica golf como el avezado pueden sacar partido de esta cancha desafiante de par 72, diseñada por Joe Lee. Hay muchos árboles y palmeras que protegen los greenes, con bunkers de arena blanca y cuatro hectáreas de lagos, uno de los cuales se caracteriza por contener un green-isla. La cancha de 73 hectáreas incluye cinco par cincos, uno de los cuales –de 570 yardas– se encuentra entre los más largos de la Florida.

Como decíamos, cada carro está equipado con tecnología GPS capaz de calcular la distancia exacta en yardas al centro del green, como así también ordenar comida y bebida para que sea entregada en un lugar preciso de la cancha. Una completa boutique pro shop también hace las delicias de los jugadores, que encontrarán allí todo lo necesario para un buen equipamiento.

El Golf Center también tiene un Driving Range, una escuela de golf y un lugar para practicar putt y approaches. Como todos los campos de jerarquía, el Westin Diplomat exige vestimenta acorde. Los jeans, los shorts y los trajes de baño están prohibidos en la cancha. Las remeras deben tener mangas y cuello y los que pantalones cortos deben ser del tipo bermuda y con bolsillos.

Si su deporte es, en cambio, el tenis, el resort ofrece 10 canchas de arcilla con luces para poder jugar de noche en seis de ellas. Por supuesto, también el consabido pro shop resuelve problemas de último momento en materia de indumentaria o equipo. El centro de tenis ofrece clínicas para chicos y adultos, con lecciones privadas, máquinas lanzadoras de pelotas y hasta torneos de round robin. El staff del centro puede, incluso, buscarle un contrincante para jugar.

En el verano, los más jóvenes pueden disfrutar del Junior Tennis & Golf Camp, que ofrece lecciones de ambos deportes, como también prácticas de natación y almuerzo de lunes a jueves.

Para aquellos que tengan una visión más hedonista de la vida, su lugar es el spa. Sólo basta calzarse la bata de algodón blanco y entrar en esa atmósfera de tipo zen que envuelve todo el lugar: sus armas, sus caídas de agua, su música “medicinal”.

El spa cuenta con una zona sembrada de lockers, cuartos de vapor, saunas y jacuzzis para hombres y mujeres, centros de gym para ambos sexos y una piscina descubierta en el jardín.

Todos los tratamientos imaginables se hayan disponibles aquí. Por ejemplo el “Lavender Dreams”, con masajes, baños de aromoterapia y “body wraps”. O el “Balance Ritual”, que incluye una máscara de barro para el rostro, baños de relajación y masajes completos. También ofrecen tratamientos de rejuvenecimiento para la piel, con microaplicaciones dermatológicas, ceras y desintoxicación facial. Técnicas asiáticas de piedras calientes, Table Thai o reflexología también son muy solicitadas. Los que prefieren tratamientos con agua se pueden regalar hidroterapias aromáticas y baños como el “Green Tea Soak”. Otros paquetes disponibles incluyen yoga, pilates y personal trainers. Para completar la jornada, cruzando la fuente central, el Aura Salon ofrece un servicio de peluquería para hombres, mujeres y chicos.

La oferta gastronómica del Westin Diplomat, ya sea que uno se hospede en las torres de la playa o en el resot de golf, no puede no incluir una visita al Links Restaurant & Lounge. Allí se ofrece servicio de almuerzo y cena con vistas panorámicas, tanto desde el interior como desde la “Terrazza”.

Para cenar puede elegir un escabeche de lenguado o un lomo marinado a las hierbas. Pero sea inteligente y reserve algo del espacio de su dieta para el postre. Unas cerezas al brandy con mousse de chocolate o un crème brûlée al chocolate blanco con moras frescas y crema de vainilla batida.

En el almuerzo, más liviano, puede probar un exquisito gazpacho, un envuelto de vegetales a la parrilla o el “Hoyo en Uno”: langostinos, melón, pepinos, tomates y albaca.

La oferta de vinos incluye las mejores etiquetas del Napa Valley californiano, aunque también se pueden probar franceses (carísimos), chilenos y argentinos. © www.economiaparatodos.com.ar