Soja y maíz, expuestos a realidades diferentes
Nos encontramos transitando jornadas en las que el mercado de granos, continúa con su mirada posicionada sobre los determinantes de la oferta norteamericana de maíz y soja. El pasado lunes, tuvimos un nuevo informe de estimación de oferta y demanda del departamento de agricultura de los Estados Unidos (USDA), con algunas sorpresas que resultaron alcistas para el mercado.
Nos encontramos transitando jornadas en las que el mercado de granos, continúa con su mirada posicionada sobre los determinantes de la oferta norteamericana de maíz y soja. El pasado lunes, tuvimos un nuevo informe de estimación de oferta y demanda del departamento de agricultura de los Estados Unidos (USDA), con algunas sorpresas que resultaron alcistas para el mercado. Los operadores – guiándose por los informes semanales de evolución de los cultivos – aguardaban volúmenes de producción similares a los informados el mes pasado, toda vez que, en las semanas que nos tocaron atravesar (periodo crítico para el maíz), observamos que en la categoría “Bueno y Excelente”, se agrupaba el 64% tanto, del forrajero como de la oleaginosa. Lo inesperado, fue que el organismo introdujo una merma en la producción de ambos cultivos:
* Soja: En el mes de Julio se estimaba un nivel de rendimiento del orden de 2.993 kg/ha. En el reporte del lunes, ese dato fue ajustado a 2.865 kg/ha, marcando una merma de 128 kg/ha. Esto genero una baja en la producción estimada de 4,5 MM toneladas, aunque con las correcciones a la baja que se realizaron en las variables de consumo, las existencias finales solo se vieron disminuidas en 2 MM toneladas, bajando de 8 MM toneladas del mes de Julio, a 6 MM toneladas para el mes en curso.
* Maíz: En este caso también se realizo un ajuste a la baja en el rendimiento pasando de 9.823 kg/ha del informe pasado, a 9.691 kg/ha informados para el reporte de agosto. Esta baja de 132 kg/ha, genero una merma productiva a nivel país del orden de 4,75 MM toneladas, aunque en este caso también los ajustes realizados en las variables de consumo, hizo que el impacto en las existencias finales, sea una disminución de 3 MM toneladas, para quedar actualmente en un estimado de 46.6 MM toneladas de cara al cierre del próximo ciclo.
Ahora bien, intentemos apartarnos por un instante de las cifras oficiales, y tratemos de comprender los movimientos por los que están atravesando las cotizaciones de los granos:
En el caso del maíz, ya pasamos el periodo crítico que era la segunda quincena de julio y la primara de agosto. Podemos decir que para este periodo, el clima, sin ser el ideal, fue bueno. Los rendimientos estimados lo están indicando, como dijimos anteriormente, se proyectan 9.691 kg/ha, cuando los rendimientos de tendencia que se utilizaron en un principio, fueron superiores a los 10.000 kg/ha. La realidad es que de confirmarse la producción esperada de casi 350 MM toneladas, las cotizaciones del forrajero terminarían de recibir un “baldazo de agua fría”, y en ese escenario, los 160 U$S que se ofrecen para la nueva campaña, deberían ser considerados como atractivos, para comenzar a generar coberturas – la capacidad teórica de pago del sector exportador se encuentra en niveles de 155 U$S -.
En soja, el panorama es distinto. El desarrollo del cultivo en Estados Unidos, viene muy demorado, basta con ver que hay solo un 58% de las sojas formando vainas, lo que implica un atraso importante si lo comparamos con el 81% del año pasado o con el 68% de las últimas 5 campañas. Esto hace que se acreciente el riesgo del impacto que las heladas tempranas pueden llegar a generar sobre los rendimientos, ya que, en el caso de que aparecer, encontrara al cultivo atravesando un periodo en el cual le puede generar importantes mermas en el rendimiento. Luego los fondos de inversión, haciendo lectura de esto, se encuentran vendidos en maíz (superado el periodo crítico, se quito todo tipo de prima climática) y levemente comprados en soja, donde la oferta, aun cuenta con mayor cantidad de variables, que afectan la determinación de su volumen futuro.
También parecen estar viendo esto los compradores. Basta con observar el ritmo de la demanda. De los 37 MM toneladas que estima exportar Estado Unidos en el ciclo 13/14, ya tiene comprometido el 42.5%, cuando el promedio de los últimos 5 años, es del 27%. Claro está, que una soja noviembre por debajo de U$S/Ton 450 en chicago (U$S/Ton 270 a nivel local para el nuevo ciclo), esta visto como una oportunidad de compra para los consumidores, toda vez que bien conocen la estructura de la oferta mundial – el 60% lo aportara Sudamérica – y por estos pagos, aun, no hay nada dicho en materia productiva.
Fuente: www.juanpcanon.com