El anuncio del nombre del nuevo director ejecutivo de Microsoft, Satya Nadella, llegó acompañado con la noticia de que Bill Gates, uno de los fundadores de la empresa informática, renunciaba a su puesto como presidente de la junta de directores para convertirse en asesor tecnológico.

Las funciones de ese cargo todavía se desconocen, y los tiempos que corren son muy distintos a la dinámica que existía en el mercado cuando la compañía se fundó con el objetivo de que en cada hogar y en cada oficina, hubiera una computadora.

La variedad de dispositivos tecnológicos que está a disposición de los consumidores en la actualidad no tiene comparación con lo que había en la década del 70, cuando Microsoft inició sus operaciones. Sin embargo, la experiencia de su cofundador podría ser muy valiosa para Nadella.

La BBC le pidió a Jack Schofield, escritor experto en tecnología, su opinión acerca de la utilidad del legado de Gates para el sucesor de Steve Ballmer, quien anunció su retiro como director ejecutivo de Microsoft en agosto de 2013.

No ser el favorito

El éxito de Gates se produjo debido a que continuamente desarrolló productos en distintas áreas.

Originalmente, la empresa fue concebida para vender programas de programación como Basic, pero incursionó en el mundo de los sistemas operativos cuando el gigante IBM necesitó uno para la PC IBM.

Gates no tenía tiempo para crear uno, pero compró QDOS (por sus siglas en inglés), que se traduce como «sistema operativo rápido y sucio», y lo pulió para sacarlo al mercado como PC IBM DOS.

Se vendió a un cuarto del precio de CP/M, un producto rival. La capacidad de mercadeo de IBM se encargó del resto.

La jugada astuta de Gates fue ofrecerle a IBM un producto a bajo costo, al tiempo que conservaba los derechos del mismo para vendérselo a los rivales de la empresa informática como Microsoft MS DOS.

El resultado fue que la compañía de Gates, y no IBM, se convirtió en la propietaria de las normas que se utilizarían como referencia en lo que respecta a sistemas operativos.

La expansión continuó en áreas relacionadas: programas variados para computadoras, como Word y Excel, juegos y programas para servidores, como SQL Server e Intercambio.

A continuación, incursionó en servicios ofrecidos a través de internet, como MSN y Hotmail.

En muchos casos, Gates se apropió de compañías con presencia en el mercado ganándoles en su propio terreno. DR e IBM en cuanto a sistemas operativos se refiere; Lotus y WordPerfect en programas; Novell en el área de los sistemas operativos pero para redes; Netscape en navegadores y una coalición de proveedores de Unix con respecto a software para servidores.

Ahora se enfrenta a Sony por el liderazgo en el rubro de juegos y a Amazon y a Google por los servicios que se alojan en el ciberespacio (the cloud, o «la nube»).

Con frecuencia Microsoft no ha estado entre los favoritos, pero en esa posición ha desarrollado buena parte de sus productos exitosos.

No te encargues de todo tú mismo

Las personas de fuera de la empresa tienen la idea de que Gates ha sido el responsable de todo en Microsoft, pero en realidad, éste contrató a gente muy inteligente.

Charles Simonyi fue la primera superestrella. Llegó al área de los programas informáticos desde Xerox Parc. Su trabajo condujo a la creación de Microsoft Office.

Dave Cutler fue el siguiente. Desarrolló un sistema operativo maravilloso en minicomputadoras para la empresa Digital Equipment Corp, pero su siguiente proyecto fue cancelado.

Gates se enteró de que, por esta razón, estaba molesto, así que decidió contratarlo a él y a todo su equipo. El grupo llevó adelante Windows NT (Nueva Tecnología), que fue la base para el sistema operativo Windows XP, un éxito en ventas.

Otra adquisición fundamental fue Anders Hejlsberg, famoso en el mundo de la programación debido a que fue el autor de Turbo Pascal. Le ofrecieron US$1 millón para que se fuera a Microsoft.

El experto desarrolló el lenguaje de programación C# y el marco .NET, que es la base del sistema de programación del Windows moderno.

La política de Gates con respecto al manejo de la empresa fue contratar a gente inteligente que, según él, «tenía que ser capaz de descubrir cualquier cosa teniendo suficientes elementos».

En otras palabras, gente como él. Esto le permitió vencer a IBM, que había sido acusada de preferir que la programación fuera hecha por un gran número de personas, en vez de optar por un grupo más selecto.

Como parte del grupo de personas astutas, Nadella podría impulsar el desarrollo rápido de software en el estilo de la antigua Microsoft, en vez de seguir el camino de IBM.

Evitar errores anteriores

Gates fue muy rápido para identificar –y de hecho, crear- el mercado para programas de computadoras, pero en algunas ocasiones, el momento no fue el más adecuado.

No fue suficientemente rápido para detectar el poder de internet, por lo que tuvo que hacer un esfuerzo para alcanzar a los competidores. En otros casos, actuó antes de tiempo.

Por ejemplo, en 1999 Microsoft lanzó Web Companions, computadoras que dependían de internet, similares a las máquinas portátiles Chromebook de Google, pero mejores.

En 2001 ya había desarrollado teléfonos móviles con pantalla táctil y, en 2002, tabletas que utilizaban Windows XP.

Ninguno de ellos tuvo buena recepción y Microsoft tuvo que sufrir la ignominia de ver el posterior éxito de Apple con productos mucho más atractivos.

Perspectivas

¿Podrá Nadella hacerlo mejor? Será complicado, porque el mercado se volteó.

El Microsoft de Gates se orientaba hacia las empresas sabiendo que, cuando los precios cayeran, recurrirían a los consumidores.

Actualmente, los compradores deciden qué es lo quieren y las compañías los siguen, si pueden.

Nadella obtuvo la dirección de Microsoft estando a cargo de la división Cloud and Enterprise, un departamento que no ofrece productos para los usuarios.

Un problema que tiene que evitar es la falta de confianza.

La compañía de Gates sufrió numerosos ataques por parte del gobierno por el monopolio que tenía de la industria de las PC. Su declaración en un juicio que tuvo lugar en 1998 evidenció, en el mejor de los casos, resentimiento.

Lo que depara el futuro

Actualmente, la atención se centra en los celulares inteligentes, las tabletas y los servicios de internet, en donde no se le percibe como una amenaza porque todavía se le considera un jugador menor.

Sin embargo, Microsoft sí tiene una estrategia sólida con respecto a las «tres pantallas y una nube», una idea acuñada por Ray Ozzie, otra superestrella contratada, aunque temporalmente.

La nube, Azure, se ve bien, y las tres pantallas están articulándose a través de Windows 8 (para PC y tabletas), Windows Phone 8 (para teléfonos móviles) y Xbox One (televisión).

Este es un futuro viable si, y este es un gran «si» condicional, Nadella puede ejecutarlo suficientemente bien.

La opción que prefieren algunos inversionistas es vender todo lo demás y concentrarse en el mercado empresarial, lo que llevaría a Microsoft a un largo declive, pero muy rentable.

Este no es un error que cometería Gates. ¿Pero tiene el poder para evitarlo?

Fuente: www.bbc.co.uk