Muchas veces se ha comparado la cantidad de presidentes que tuvo nuestro país y la que tuvieron otros. Nunca creo haber visto una comparación respecto a la cantidad de ministros de Economía que tuvimos. Si la comparación de presidentes era bochornosa, ni se imaginan la de ministros de Economía.

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Seguramente se preguntarán que pasó con el resto de los países que no entran en la comparación. A nuestros hermanos latinoamericanos no los quise incluir porque de nada nos sirve compararnos con los que corrieron la misma suerte. Tampoco sirve compararnos con asiáticos o africanos con los cuales compartimos poco de historia y cultura. Elegí países hoy exitosos con los cuales estábamos en pie de igualdad hace 100 años y con los cuales tenemos raíces comunes.

Sólo Francia nos gana en rotación, pero hay que perdonarlo. Soportó dos guerras mundiales, guerras coloniales y una ocupación.

Los números hablan por sí solos. Si bien nuestra ya interminable decadencia es causa de muchas variables, lo planteado aquí es para considerar. Las instituciones las hacen los hombres. Si cambiamos a los hombres todo el tiempo, las instituciones quedarán en ruinas. Peor aún si consideramos que nuestros hombres son mejores saqueadores que constructores. © www.economiaparatodos.com.ar