La Unión Europea acaba de hacer conocer una propuesta que, de resultar aprobada, puede no solamente empujar las tasas de interés europeas en general hacia arriba, sino también impactar negativamente en la estabilidad futura de la moneda común, esto es, el euro.
Me refiero a la iniciativa que apunta a tratar de flexibilizar las reglas ya acordadas en materia de disciplina fiscal y presupuestaria.
Hasta el momento, existe una norma o parámetro común para todos, que fuera adoptado hace ya seis años atrás, cuando se lanzó la moneda común. Es la que imposibilita a los Estados miembros de la Unión operar con déficit presupuestarios que excedan del 3% del respectivo Producto Bruto Interno (PBI).
Ahora, sucumbiendo a las fuertes presiones de Alemania y Francia, países que tienen, ambos, déficit presupuestarios que exceden ese límite, se propone adoptar nada menos que dieciséis distintas excepciones para la aplicación de esa regla.
Esas excepciones ahora propuestas tienen que ver con un verdadero mosaico de situaciones específicas muy variadas, que van desde el cumplimiento del servicio de la deuda externa; el manejo del gasto público en tiempos de bonanza; las reformas de los respectivos sistemas nacionales de seguridad social, que se acercan al galope; el impacto adverso de las relaciones cambiarias; al aumento del gasto nacional en investigación y desarrollo.
Además, como si esto fuera poco, ahora se sugiere ampliar la única excepción que hoy existe, que es la de enfrentar una contracción de –por lo menos– el 2% del PBI, para reemplazar ese sensato concepto con uno mucho más genérico, que hable de la existencia de solo “una contracción”, cualquiera sea efectivamente su dimensión.
Las calificadoras de riesgo, como Standard & Poor’s, han presurosamente advertido a sus clientes que esto puede modificar negativamente la calificación de alguna de las actuales deudas soberanas de los países miembros de la Unión Europea. De allí la preocupación. © www.economiaparatodos.com.ar
Emilio Cárdenas es ex Representante Permanente de la Argentina ante la Organización de las Naciones Unidas. |