Brasil marca la inflación anual más baja desde 2010
El índice de precios al consumidor de Brasil IPCA se elevó un 0,36% en mayo frente al 0,64% de abril, menos de lo previsto por los analistas, dijo este miércoles la agencia oficial de estadísticas IBGE.
En los 12 meses a mayo, el IPCA llegó a un 4,99%, su tasa más baja desde septiembre del 2010. La tasa de inflación a doce meses bajó por octavo mes consecutivo.La inflación anual de Brasil cayó en mayo a su nivel más bajo en 20 meses, lo que allana la vía para que el banco central mantenga su política de recortes en las tasas de interés para impulsar su vacilante economía.
El índice de precios al consumidor de Brasil IPCA se elevó un 0,36% en mayo frente al 0,64% de abril, menos de lo previsto por los analistas, dijo este miércoles la agencia oficial de estadísticas IBGE.
En los 12 meses a mayo, el IPCA llegó a un 4,99%, su tasa más baja desde septiembre del 2010. La tasa de inflación a doce meses bajó por octavo mes consecutivo.
El banco central brasileño elevó las tasas de interés durante el primer semestre del año pasado para cumplir con su objetivo inflacionario.
Ahora, a medida que se enfrían los precios al consumidor, su desafío principal ha sido reanimar el crecimiento económico, que prácticamente se ha estancado en los últimos trimestres.
"(El IPCA) nos da grados de libertad para tener una política monetaria más flexible", dijo el ministro de Hacienda, Guido Mantega.
El banco central recortó su tasa de interés de referencia siete veces seguidas desde agosto hasta tocar un mínimo histórico de un 8,5 por ciento la semana pasada.
Analistas esperan que la tasa referencial de Brasil cierre este año en un 8 por ciento, según la mediana de las previsiones de un sondeo semanal del banco central.
"La inflación es más baja y la actividad económica es más débil que antes. Eso le da margen al banco central para que corte más profundamente las tasas", dijo Carlos Kawall, economista jefe de J. Safra, en Sao Paulo.
El economista anticipa tres recortes de 50 puntos base cada uno hasta un 7%.
El Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff ya ha activado una serie de exenciones tributarias e incentivos de crédito para impulsar las inversiones y alimentar la demanda por productos manufacturados dentro de Brasil.
El año pasado, el IPCA subió un 6,5%, su mayor avance anual en siete años.
El Gobierno fijó para este año un objetivo inflacionario de un 4,5%, con un rango de tolerancia de + ó – 2 puntos porcentuales.
Los futuros de las tasas de interés caían tras el dato del IPCA, lo que apoya la visión de que los operadores esperan más recortes en las tasas de interés.
Fuente: Reuters