Dólar y cocaína
El Banco Central estaría perdiendo entre u$s 50 y 100 millones por día, el único ingreso de dólares es por exportaciones, el famoso “blanqueo” en realidad debió llamarse “negreo K” de dólares vía CEDINES o BAADE, tuvo el mismo éxito que Ramón Diaz dirigiendo a River
Las reservas brutas apenas superan los u$s 34 mil millones y gran parte de los activos del Banco Central son “pagadioses”, cuyo valor real es “cero”.
El ritmo devaluatorio oficial ronda ya el 25%, es decir a la par de la inflación real, es probable que luego del día 27 se autoricen importaciones de “TRIGO”, un nuevo accidente en el ferrocarril Sarmiento desnudó el estado calamitoso del sistema ferroviario, pero se trata de la “década ganada”
El porvenir energético exigirá un desembolso tremebundo de dinero, no solo para hacer las inversiones necesarias para recuperar el autoabastecimiento, como así también para la importación necesaria para el “mientrastanto”, algunos estiman que como mínimo será necesarios más de u$s 25 mil por año para ello.
ARGENTINA, según lo explico JAVIER GONZALEZ FRAGA en La Nación, está entre los diez países que tienen una inflación superior al 10% anual.
La inflación afecta de modo directo el “valor del dinero” y prueba de ello al alcance directo de “…todos y todas…”, sin ser necesario la intervención del Señor Magneto ni un titulo de “clarín”, es la diferencia de valor real que tiene un billete de $ cien comparándolo con dos o tres años anteriores.
¿Cuántas veces por día es necesario hoy cambiar un billete de cien pesos…? Y la otra pregunta más cruel es ¿Quiénes tienen capacidad para cambiar un billete de cien pesos varias veces por día…? Habría que hacerles esa pregunta a los jubilados que cobran la mínima que son más del 65% del padrón total…
Hoy día harían falta 69 salarios de diez mil pesos para comprar dos ambientes mientras que en 2012 solo se necesitaban 46 salarios, según informó la DIRECCIÓN DE ESTADISTICAS Y CENSOS de la ciudad de Buenos Aires.
Va de suyo con ese nivel salarial es imposible que una familia tipo pudiera acceder a «un dos ambientes».
La “inflación” en cierto modo tiene una relación con la cocaína ya que ingresé a la página web “Medline Plus” y pude leer lo siguiente sobre ese alcaloide: “La cocaína es una droga poderosa que estimula el cerebro. Las personas que la consumen pueden desarrollar una fuerte adicción. Es posible que tengan que consumir cada vez más droga para estimularse. Se vende en las calles en forma de polvo blanco y fino. Existen dos formas de cocaína: sal de hidroclorato y cristales de cocaína (crack). La sal se disuelve en agua. Las personas pueden inyectársela en una vena o inhalarla por la nariz. Los cristales pueden fumarse. La forma de la cocaína que se fuma se conoce como crack.
La “inflación” también es una droga peligrosa adictiva y el gobierno “K” es precisamente su víctima, ya que estimula el consumo, porque la gente busca protegerse de su pérdida constante de valor amén de otros vicios, continuemos leyendo a Gonzalez Fraga “Con alta inflación, la distorsión de los precios relativos es muy grande y surgen temores a salariazos, tarifazos o megadevaluaciones, lo que ahuyenta la inversión productiva. Sin inversiones no hay aumentos de producción ni de productividad. Tanto el empleo como los salarios dejan de crecer, más allá de la ilusión que se genera con los aumentos nominales de salarios. También la inversión extranjera huye de los países con alta inflación, porque generalmente ésta viene acompañada de políticas intervencionistas, restricciones cambiarias y fuertes devaluaciones. En consecuencia, no hay ninguna razón para esperar que un país crezca más con inflación, ni mucho menos que aumente el bienestar de sus habitantes, especialmente de los que dependen de ingresos fijos, como asalariados y jubilados…”
Podríamos decir que la inflación y la cocaína exigen incrementos de dosis para estimularse y finalmente para destruirse porque las dos llevan a la muerte, la primera mata un “modelo” económico y la segunda termina con la vida de las personas.
Las dos nos llevan a la mentira porque nadie se quiere asumir como “adicto” y en el caso del gobierno “K” la mayor mentira es la adulteración de las estadísticas que hoy nos sumergen en esto que se ha dado en llamar “el relato” en el que la inflación no existe y la mínima que puede existir es culpa de otros.
Ante la relación que han hecho un funcionario público y un senador de la nación entre el valor del dólar y la cocaína cabria decir que la tenencia y consumo de dólares no está penada y la tenencia de cocaína solo se podría justificar bajo control médico.
El pago con dólares billete es legal y el pago con gramos de cocaína, no.
El dólar es un refugio contra la acción “K” por causa de la inflación, diría es terapéutico porque protege la salud económica de la gente y garantiza la reserva de valor de sus ahorros.
Por el contrario el consumo de la cocaína combinado con las bebidas alcohólicas es una causa común de muerte relacionada con las drogas.
Estos funcionarios al relacionar la droga con el valor del dólar solo demuestran ignorancia y obsecuencia porque no olvidemos que Aníbal Fernández llegó a decir que no cambiaría sus dólares en el mercado oficial porque no es estúpido, después tuvo que ir a un banco con BONETE DE COLORES y cambiarlos al valor oficial y allí puso en duda su negación anterior….todo sea por el relato “K”….
Señores el dólar ya paso la barrera de los diez pesos y eso significa mucho, significa que nuestra economía tienen mucha fiebre y está en el límite de la septicemia cuyo primer síntoma público y notorio puede ser el próximo 27 de octubre…ya que con estos funcionarios la septicemia se convertirá en un signo de excelente salud “K”….de donde será posible que sea más grave tener un dólar que un gramo de cocaína ya que el narcotráfico no parece ser una prioridad “K”….