El clima juega un papel fundamental en nuestro mercado y está a punto de jugarlo en el hemisferio norte
En EE.UU. avanza la siembra con buen ritmo, encarando el último tramo en la carrera y por entrar en el mercado climático. En nuestra zona, la cosecha y su comercialización se desarrollan con ritmo lento, influenciadas por el clima y a la espera de novedades económicas
La campaña de siembra en el hemisferio norte ya está entrando en la recta final, con un buen avance en EE.UU. de la siembra de los cultivos de verano. Tanto soja como maíz presentan una buena cobertura del área estimada de siembra, con el forrajero alcanzando el 88%, igual valor que el promedio quinquenal, y la siembra del poroto llegando a cubrir el 59% del área total, cuando el promedio se ubica en 56%. Nuevamente, el farmer estadounidense mostró su capacidad de siembra, implantando el 25% del área de soja y el 15% del área de maíz en una misma semana. Por si fuera poco, también cubrió el 25% del terreno destinado a trigo primaveral. A partir de mediados de junio ya estaremos entrando en el mercado climático estadounidense, afectando el desarrollo de los cultivos. Aunque cabe aclarar que las proyecciones, hasta aquí, no generan demasiado temor.
En lo que a precios respecta, por el lado del poroto, la suba observada entre febrero y abril parece haber desacelerado, pero la tendencia alcista se todavía está intacta y el contrato más cercano de soja vuelve a rondar la zona de 550u$s/tn. Las ventas de soja estadounidense no se detienen, como tampoco los embarques y, con los márgenes de molienda en China volviendo a arrojar resultados positivos, hay dudas respecto a que se materialicen cancelaciones. Sin embargo, los precios de la 14/15 se ubican 100u$s/tn debajo de estos montos, presionados justamente en el buen desarrollo que viene presentando la campaña, con una producción esperada de más de 98M de toneladas, lo que permitiría una muy fuerte recomposición de stocks.
Respecto del forrajero, las cotizaciones han estado en caída durante el último mes, rondando actualmente los 185u$s/tn. Aún así, todavía no se puede hablar de pisos para el precio del cereal, muy influenciado por lo que se espera producir. Ni siquiera las buenas ventas de maíz, ya casi alcanzando las proyecciones del USDA, consiguen ponerle un freno. Por si fuera poco, esta semana, los fondos especulativos vendieron contratos por más de 3.3M de toneladas disminuyendo las posibilidades de una recuperación.
Por el lado del trigo, la situación parece positiva para la producción en todos lados, salvo en EE.UU., con una producción invernal muy golpeada, aunque ha mejorado levemente luego de que algunas lluvias aliviaran las zonas productivas del sur, y los cultivos en condición buena o excelente volvieran al 30%, subiendo 1%. La leve mejora en la situación ucraniana también pesa en las cotizaciones, ya que el nuevo gobierno evita posturas extremas e intenta poner paños fríos con Rusia. Esto reduce la incertidumbre respecto a las provisiones del Mar Negro y quita prima de riesgo a los precios. Al fin del día, por más que la producción estadounidense se resienta, no puede evitar verse afectada por lo que acontece en el globo. La posición más cercana opera en 230u$s/tn y también está en tendencia bajista.
Revisemos ahora lo que sucede en nuestro país. Si bien la cosecha lleva buen tiempo de iniciada, las labores vienen presentando un atraso notable si se lo compara con el año anterior y mucho tuvo que ver el clima en ello. Por el lado de la soja, según el PAS de la BCBA, se ha recogido el 73.8% del área estimada, cuando el año pasado rondábamos el 96% a esta altura. Pero no es solo la cosecha lo que se retrasa. Las ventas del poroto también muestran una disminución y solo se comercializó un 30%, aproximadamente, de la producción. Mucho tuvo que ver el clima en esto, pero también hay que decir que el productor argentino sigue reacio a vender por el resguardo que le implica la soja frente a una devaluación. Esto se vio reflejado en los precios, con una soja disponible que subió a la par de Chicago y se mantiene en la zona de 323u$s/tn, mientras que julio y noviembre casi no pagaban prima por diferir la entrega. Sin dudas, cada productor conoce sus necesidades financieras y los precios de venta que necesita, pero no hay que desestimar que, con casi 56M de toneladas de producción, si llegamos a fin de año con este retraso de ventas, habrá mucha oferta acumulada para vender en los últimos meses, con precios de referencia en Chicago 100u$s/tn debajo de los valores actuales. Puede que las primas FOB cubran esa caída, pero si la soja tiene un buen desarrollo en el hemisferio norte, parece difícil que venga a buscarla a nuestro país a precios altos. Diferir todas las ventas lo más posible parece un estrategia arriesgada, pero para quienes quieran seguirla, es recomendable cubrirse de una baja con alguna opción, como el put 316, que cotiza 6u$s/tn y asegura un piso de venta en 310u$s/tn de aquí a fin de año, abierto a tipo de cambio y en condiciones de beneficiarse del mercado climático del hemisferio norte.
Respecto del maíz, la situación no difiere mucho. Solo se ha cosechado el 36% del área total, según el PAS, también muy retrasado por las dificultades climáticas a la hora de las labores, pero también con una clara injerencia del maíz tardío. A esta altura del año pasado, la recolección superaba el 70%. Esto también tuvo su correlato en los precios, donde la entrega corta de maíz se estuvo pagando hasta 173u$s/tn en la última semana, mientras que la contractual rondaba los 157u$s/tn. Hay pocos incentivos a las subas de mediano plazo, con la llegada de los lotes tardíos en el plano local, y la safrinha en Brasil llegando en agosto y la cosecha de EE.UU. posteriormente, en el plano internacional. Para quien tenga necesidad de cubrir pagos, si se puede acceder a los precios actuales, la venta parece una buena posibilidad. Caso contrario, es recomendable para quien prefiera guardar, estar atento al mercado de consumos, donde pueden llegar a darse necesidades que impliquen buenos precios.
Finalmente, en lo que al trigo local respecta, la mercadería disponible sigue rondando los 2100$/tn, según la zona donde se quiera vender, con la molinería participando de forma activa, aunque no se observa desesperación. Sin nuevos ROEs que impliquen compras de exportación a la vista, parece difícil pensar en valor muy superiores. A su vez, comenzó la siembra del cultivo invernal, llevándose implantado el 6.4% del área, estimada en 4.3M de has según el PAS. A rindes del año pasado, estaríamos hablando de entre 11.5M y 12M de toneladas, dejando un saldo exportable de 6M. Las cotizaciones del cereal para la 14/15 están algo por encima de los 200u$s/tn. ¿Es un problema para nuestros precios de trigo que el mundo tenga una buena producción triguera? A los niveles que se espera cosechar en nuestro país actualmente, pareciera que no. No debemos olvidar que nuestro vecino, Brasil, puede importar todo nuestro saldo exportable, si este se ubica por debajo de los 6M de toneladas, más aún en un año donde EE.UU. la pasa mal. Cabe destacar que este año, nuestro vecino ha decidido no eximir de aranceles de importación al trigo que no sea del Mercosur. Lo que deja lugar a algún aumento en los precios. Para quienes quieran tomar precio, es recomendable no cerrarse del todo a posibles subas. Se puede vender forward a 202u$s/tn, y si no se quiere comprometer la mercadería, hay futuros a 203u$s/tn. A esto puede sumarse un call spread 210/230 con 4.5u$s/tn, que permite copiar subas potenciales.
Fuente: Centro de Gestión Agropecuaria – Fundación Libertad