¿Extravagancias electorales…?
Desde dos fuentes totalmente distintas, una cercana al oficialismo, me acercaron resultados de una encuesta que se habría realizado en los últimos días que mostraban que si kristina pudiera ser candidata a presidente, podría ganar la primera vuelta con un porcentaje que en un caso orillaba el 28% y en el otro superaba cómodamente el 30%
Claro la cosa es que pasaría en una segunda vuelta, pero el caso es que si bien allí no le iría tan bien, habría arrastrado un porcentaje importante de votos que le permitirían mantener una fuerza casi decisiva en el Congreso.
Entonces la cuestión pasaría por proponer a Kristina para un cargo electivo, ¿gobernadora de Buenos Aires, senadora o diputada…? Considerando que en ese caso también funcionaría el “arrastre” aunque se duda que luego de ser elegida, aceptara el cargo.
De ese modo el “Kristinismo”, no ya el peronismo, sería partícipe necesario de la “gobernanza que se iniciará el próximo 10 de diciembre de 2015 que significaría en los hechos un condicionamiento del pasado respecto al presente, es lo que Llach y Martin Lagos explican como la “path dependence” o dependencia del sendero.
Recuerdo una vez más una nota de Carlos Pagni en la que decía que a los sectores de menores ingreso poco les preocupa el mercado, defienden el control de precios, la propiedad privada no forma parte de sus preferencias, y en el sector de mayores ingresos parecería que subsisten los intereses corporativos que se respaldan en políticas regulatorias para compensar su falta de productividad y de ese modo facilitar la obtención de ganancias sin tener que pensar en las duras competencias que impone el mercado. Recordemos que hay empresas especialistas para operar en “mercados altamente regulados”.
Si tenemos en cuenta esta generalizada “path dependence”, que no es más que la cultura media del argentino promedio, vemos que los resultados de esas encuestas podrían ser cuando menos muy aproximados a la realidad, aunque las hubiere pagado el propio oficialismo…pero no se podría negar que el oficialismo, según todas las mediciones oscilaría en una intención de voto que varía entre el 20 y 25%, sin kristina.-
Su piso es envidiable para cualquier partido o político y eso explica porque Scioli se comporta como un hibrido.
Más allá de la existencia de la encuesta de la que hablamos al inicio, lo cierto es que se podría llegar a la misma conclusión, simplemente razonando.
La insolvencia fiscal, la inflación, el exceso de regulación y la seguridad que garantiza el empleo público, más allá de su necesidad y productividad son creencias muy arraigadas en una mayoría que es la que decide una elección. No habría conciencia de lo que sería una “buena administración de los bienes públicos en la que el “favor” no existiera.
En ese sentido fueron muy sinceras y bienvenidas las declaraciones de Mariano Recalde al diario “AMBITO FINANCIERO” cuando reconoce el exceso de empleados que tiene AEROLÍNEAS ARGENTINAS, su pésima distribución. El exceso de regulaciones laborales que impiden el cambio de funciones o el ejercicio del llamado “ius variandi”, la desaprensión gremial que pide niveles salarias como si se tratara de una empresa que genera sus propios recursos sin tener en cuenta que si no fuera por el financiamiento de “todas y todos” hubiera quebrado cien veces.
Sin embargo probablemente quien propusiera racionalizarla, para de una vez por todas saber sobre su viabilidad, perdería votos, dado que hay una mayoría que sin saber porqué cree que es una empresa necesaria.
Eso vale para otras estatizaciones ya que cada empresa del estado se convierte en un coto gremial y para ello solo basta ver lo que sucede con la decadencia y pérdida de días de clase en el sistema educativo estatal que ya es incapaz de facilitar a sus alumnos la comprensión de textos.
Lo que le interesa al “argentino medio” es el consumo como lo puso de manifiesto el sábado 6 de septiembre Eduardo Fidanza en “LA nación” y eso nos hace justificar el endeudamiento para financiar gasto y luego para repudiar los pagos amparándonos en supuestos principios soberanos.
La soberanía no es solo una fuente de derechos es también cumplir con las obligaciones y el estado que no cumple con ellas hace de la soberanía una letanía que nos convierte, como país, en un bien mostrenco.
Eso es la Argentina hoy, la “Dependencia del sendero” se ha convertido en una suerte de trampa virtuosa” y así seguiremos, (encuestas mas o encuestas menos) mientras no aparezca una dirigencia capaz de convocar al esfuerzo y el sacrificio que sustente la esperanza cierta que en el futuro podríamos alcanzar un PBI equivalente al 99% (porqué no el 100%) de los países más desarrollados como lo pudimos hacer a principios del siglo XX, para ello necesitamos más obligaciones, menos derechos y nada de “k”.
No olvidemos que el cumplimiento de nuestras obligaciones son el derecho sagrado del “bien común”, superior al de todos y cada uno de nosotros.
El shopping electoral de los “k” esta en las miseria del ser humano, tanto de los pobres e indigentes, más comprensible, como de los que ganan salarios indecentes comparados con su idoneidad que solo son viables por el despilfarro del gasto público, los grupos económicos especialistas en comportamientos “k” que lucraban y lucran con los caprichos de la Secretaria de comercio que se caracteriza por incumplir con gran parte de sus obligaciones como la de fundar las “OBSERVACIONES” a las DJAI.
Mientras tanto las extravagancias electorales serán crudas realidades y no le echemos la culpa a los “k” somos nosotros a los que nos gusta vivir así, sino estas cosas no pasarían, por eso la autocrítica la necesitamos cada uno y los dirigentes políticos dejen las encuestas de lado y anímense a generar otra opinión.