En el marco de la gira nacional de nuestro nuevo libro, los autores de “Cuado el relato es una FARSA” teníamos organizada una presentación en la ciudad de Bahía Blanca, prevista para las 19 horas del día lunes 30 de septiembre en el Sindicato de Correos, sito en Castelli 237.

A las 10 de la mañana de ese mismo día, los organizadores del evento se comunicaron con nosotros a los efectos de notificarnos que las autoridades del salón habían decidido dar de baja la reserva del lugar, como resultado de insistentes presiones políticas y amenazas que recibieron de prepotentes grupos izquierdistas (con el Partido Comunista a la cabeza) y kirchneristas.

Ante la maniobra proscriptiva, los autores del libro decidimos no retroceder ni un paso a la censura izquierdista, y de inmediato remplazamos el lugar y reservamos el salón del Centro de Consignatarios de Hacienda, ubicado en Av. Alem 858. Esta vez, los amedrentamientos y amenazas se dirigieron a los responsables de este nuevo lugar, quienes nos comunicaron que se vieron forzados a dar de baja el evento una hora antes de su realización, con el objetivo de preservar sanas tanto las instalaciones de la institución como la integridad física de los concurrentes.

Desde distintos medios de comunicación bahieneses, los autores de “Cuando el relato es una FARSA” retamos a debatir públicamente a los agentes de la runfla kirchnerista-comunista, punto por punto, tanto el contenido del libro como otros asuntos que sean de su interés. Se les ofreció a los censuradores incluso incorporar dos militantes al panel, para que en lugar de arrojar piedras, hicieran el intento de arrojar ideas. Pero se confirmó lo que ya era una obviedad: los proscriptores del libro no habían siquiera leído lo que estaban proscribiendo. Desconocían por completo de qué trataba el ensayo, y en consecuencia rechazaron nuestra propuesta de civilizarse.

Lenin llamaba “idiotas útiles” a los ciudadanos de países occidentales que resultaban funcionales al comunismo soviético. En este caso, los autores del libro agraviado agradecemos con sinceridad a los idiotas útiles kirchneristas-comunistas, porque con su acto de primitivismo, oficiaron como propagandistas ad-honorem de la obra que pretendían prohibir. En efecto, el tema estuvo al rojo vivo en todos los medios de Bahía Blanca, la curiosidad respecto del contenido del libro se amplificó y las librerías bahienses agotaron rápidamente su stock (que ya están reponiendo con toda velocidad).

El evento por ahora no se pudo llevar a cabo tras la embestida de estos salvajes insurgentes, empero, le adelantamos a la querida comunidad bahiense que  volveremos en el mes de noviembre a la ciudad a presentar este mismo libro para discutirlo con todo gusto tanto con los que piensan como nosotros como con quienes disientes con nuestras ideas. De manera tal que invitamos a los pandilleros de circunstancia a que se capaciten y se informen a los efectos de poder dar oportuno debate público sobre los temarios que transitoriamente intentaron acallar.

Fuente: www.laprensapopular.com.ar