Sigue la fuerte presión del BCRA en el mercado
Las maniobras de Moreno para frenar el blue y que traigan dólares
Panorama argentino
El secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, resultó ser una vez más el personaje de la semana. Esta vez, con su característico tono destemplado y autoritario, citó a una reunión en su despacho a los presidentes de los bancos privados nacionales e insólitamente los amenazó con multas y prisiones si no lo ayudan a bajar el precio del dólar paralelo. Además, a los gritos, les dijo que presionaran a sus clientes para que vendan los dólares que, seguramente, tienen guardados en negro, diciéndoles que si no cumplen con ese mandato les aplicará la Ley de Abastecimiento, que prevé la aplicación de multas y hasta penas de prisión, pese a que sólo quedó vigente el inciso de un artículo, porque el resto fue derogado en 1991. Moreno también ha hecho enviar cartas personalizadas a empresas e individuos que, según él, están en condiciones de «interesarse» en comprar el Bono Argentino de Ahorro para el Desarrollo Energético (BAADE), quienes entre febrero y octubre de 2011 compraron millones de dólares y los giraron al exterior. Pero ahí no terminó su increíble acción, que muestra una desesperada lucha por conseguir dólares, sea como sea. Ahora, algunas empresas han logrado que Moreno les autorice a girar dividendos al exterior, aunque las que ya lo han hecho es porque exportan más de lo que importan. Al respecto, la semana pasada el BCRA emitió la Comunicación “A” 5465, mediante la que se autoriza la aplicación de cobros en divisas por exportaciones de bienes y servicios al pago de los servicios de capital e intereses de nuevas deudas ingresadas por el mercado local de cambio, por emisión de bonos en el exterior, préstamos de organismos internacionales y otros créditos que sean utilizados para aumentar la producción de bienes aquí y que en su mayor parte deberán venderse en el exterior y/o que permitirán sustituir importaciones. Pero todo esto no es todo. La semana pasada el BCRA ejerció una fuerte presión a través de sus funcionarios, dirigida especialmente a los operadores de los bancos, a quienes molestó permanentemente para que informaran sobre la operaciones que estaban realizando, conminándolos a que trataran de equilibrar la oferta con la demanda de sus clientes antes de salir al mercado, les exigía que retiraran de las pantallas del SIOPEL sus ofertas de compra o que esperaran a que los exportadores iniciaran sus ventas para cubrir la demanda de sus clientes importadores. Sin duda, todo un despropósito. Así, el MULC argentino operó con escaso volumen, habiendo transado las entidades entre sí un total de unos USD 1.156 millones en las cinco jornadas, con un promedio diario de USD 231 millones, un 22% menos que en la semana anterior. El BCRA, a través del Banco Nación, fijó el cierre vendedor de transferencia en $ 5,4810, con un ajuste al alza semanal del 0,3%, la mitad del que hizo en el similar período anterior. Por su parte, el viernes el BCRA pudo comprar por primera vez después de seis jornadas un excedente en el mercado de unos USD 80 millones, habiendo perdido al cabo de la semana USD 90 millones. Al cierre del viernes las reservas sumaban USD 37.335 millones, mostrando una caída de USD 119 millones, aunque en lo que va del mes lleva recuperados unos USD 330 millones. En el mercado de futuros (NDF) de New York el peso/dólar quedó operado a $ 8,5498 (56%).
Panorama internacional
Con idas y venidas, finalmente el euro conseguía ubicarse en la figura de 1,32 dólares, habiendo luchado por ello durante toda la semana pasada. La moneda única lograba mantenerse en sus máximos en un mes en el mercado de Nueva York, luego de que el dato sobre el índice empresarial alemán IFO mostrara que el ánimo comercial era un poco mejor al esperado en julio. Sondeos hechos el miércoles había mostrado una expansión más veloz de lo anticipado en la actividad del sector privado de Alemania y Francia, catapultando a la moneda europea a marcar el jueves un máximo de 1,3290 dólares. Por su parte, la libra esterlina también oscilaba de manera amplia luego de que datos publicados indicaron que la economía británica creció 0,6% en el segundo trimestre, repuntando con respecto a los tres meses previos para lograr un ritmo anual de 1,4%. La divisa británica subía ese día a 1,5420 dólares. Pero también en aquél día, una decisión de la Comisión Europea causó fuertes temores cuando informó que había decidido posponer la entrega del siguiente tramo del rescate de Grecia, porque aún no había cumplido varias reformas requeridas por la troika. Pero el viernes, después de que el parlamento griego aplicara una dura medida de recorte de empleos públicos en el sector educativo, la CE cambió su decisión al anunciar que el lunes, por hoy, pondrá los 2.500 millones de euros en manos del país helénico. El dólar caía el viernes hasta un máximo de 97,56 yenes, pero la moneda nipona aún así, sigue siendo la de peor desempeño entre las 36 más activas frente al dólar en lo que va del año, con un retroceso de 13%. Y a pesar de las dudas y de los fuertes movimientos de los últimos días, los más conocidos analistas técnicos afirman que la tendencia alcista del dólar continuaría. La divisa estadounidense ha mostrado una fuerte correlación con los bonos del Tesoro estadounidense en las últimas semanas, mientras el mercado se ha centrado en cuándo la Reserva Federal podría empezar a reducir su estímulo monetario, tras la reunión del FOMC del martes y miércoles. Un dato para destacar fue el informado por Reuters de que el jueves pasado en el mercado europeo cambiaron de manos unos 4.400 millones de dólares. Con relación a la moneda única, según los analistas técnicos la perspectiva a corto plazo es ligeramente alcista, con resistencias en 1.3295 y 1.3320 y soportes en 1.3200 y 1.3165. Al cierre del viernes en New York el euro cotizaba a USD 1,3280