Si no hice mal las cuentas, el aumento del boleto de tren y colectivo para quienes no tienen la tarjeta SUBE afectará más a los sectores de menores ingresos. En efecto, el mayor incremento para los que no tengan la tarjeta se da en los trayectos más largos. Ahora bien, en general son los sectores de ingresos medios bajos y bajos los que tienen los trayectos más largos en transporte público. Los sectores de ingresos medios y medios altos, si usan el transporte público, lo hacen por trayectos cortos y si son trayectos largos, normalmente utilizan el automóvil.

Es la empleada doméstica o el obrero de la construcción el que, normalmente, tiene largos trayectos de viaje en colectivo o tren. Viven en el conurbano y suelen viajar a la Capital Federal ha hacer sus trabajos. Bien, a esos es dónde el gobierno le aplica el mayor aumento ya que el trayecto de mayor extensión pasa de $ 1,74 a $ 4 para quienes no cuenten con la tarjeta.

A pesar que Garré diga que la inseguridad es una sensación, a la gente le siguen robando y más de un trabajador sufrirá el robo de su billetera y de la tarjeta. En cuyo caso tendrá que pagar una fortuna para viajar hasta que pague otra fortuna para volver a tener la tarjeta que le robaron.

¡Esto sí que es progresismo en estado químicamente puro!

Más de uno debe estar pensando: Celestino Rodrigo, te perdonamos. ¡Volvé!