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lunes 28 de julio de 2014

Una sociedad sin estética institucional

Una sociedad sin estética institucional

La obra social para el personal  de servicio doméstico se incrementó en un 133%,  el monotributo sufre un aumento del  60% en sus aportes a la obra social, en la ciudad de Buenos Aires la VTC  aumentó  un 80% y será obligatoria a partir de 2015, el personal de aduana reclama un incremento del 28%, el boleto mínimo en la ciudad de Buenos aires, se incrementó desde el 1º de enero en un 100 por cien, pasó de $ 1,50 a $ 3,00

La “inflación cuidada” medida por el indeK fue de poco más del 15% para el primer semestre, mientras que para otras mediciones más reales habría sido del 20% y pienso que la ‘real de bolsillo’ es mucho mayor.

Tomando como muestra  estos pocos casos vemos que nuestra economía es totalmente antiestética como los son los funcionarios “k” y en especial este ministro de economía cuyo sola presencia fastidia por su grosería y su ilimitada ambición que la mediocridad intelectual de la presidente alimenta con entusiasmo.

Esta falta de proporciones o de armonía de las variables, el tremendo desorden de los precios relativos, no solo está paralizando nuestro mercado interno con caídas de ventas en casi todos los rubros, sino también nuestro comercio exterior. En este primer semestre con relación al año anterior la caída fue de u$s 7000 mil millones habiendo sido negativas las exportaciones a 14 de los principales 16 mercados a los que vendimos mas de u$s 400 millones en el primer cuatrimestre de 2013.

El gobierno castiga a la mayoría de los bienes exportables con retenciones aplicadas sobre un tipo de cambio irreal y la presión fiscal ya es insoportable.

Esto está llevando a un crecimiento de los niveles de pobreza, según el último informe de la UCA que ya incluyen a 4  de cada 10 personas que viven en hogares con niños, están en ese bajo nivel social. Un 32% de hogares no tienen cloacas y un 11% no tienen acceso a una red de agua.

El 27,5 % de los argentinos viven en situación de pobreza y para el indeK, ese porcentaje se reduce al 3,5% (sic) a fines de 2013. Esto ya supera el nivel de grosería para convertirse en un insulto a “todas y todos” y en especial a los pobres.

Carece de estética el tratamiento que se le está dando al juicio de los “vulture fund” contra la Argentina sin advertir que tanto meneo de la cláusula “rufo” podría generar responsabilidades por obrar con “mala fe”. En efecto, todos los sofismas que se están largando a circular para decir que el cumplimiento de una sentencia judicial firme, en un juicio resistido y apelado hasta agotar instancias podría generar que se dispare la clausula “rufo” que establece una extensión de beneficios otorgados “voluntariamente” a terceros sobre los mismos bonos canjeados, es como diría Michael Corleone “…un insulto a la inteligencia que me hace enojar mucho…”.

Por las consecuencias de esta cuestión se impone una consulta entre las fuerzas políticas con presencia en el Congreso de la nación para resolver como se cumplirá la sentencia del juez Griesa que afectará a los próximos gobiernos, pero la mediocridad ya alarmante de la presidente y su acomplejado ministro excluyen toda posibilidad de diálogo, por carecer de idoneidad profesional para efectuar propuestas o recibir críticas.

Carece de estética la política argentina, siempre en busca de personalismos providenciales y de hegemonías que hacen del birlibirloque políticas de estado.

La descalificación se convierte en método y el agravio en fundamento de razón y así alimentamos este proceso de decadencia que parece no tener fin.

Nuestros funcionarios comenzado por Kristina carecen del sentido de la belleza y por tanto del buen gusto.

La relación social carece de estética, los conflictos se han convertido en arma de agresión hacia el prójimo, los dirigentes sociales resultan impotentes para su administración y el estado carece de la necesaria profesionalidad e idoneidad de mediación y en su caso de arbitraje confiable como instancia de resolución voluntaria u obligatoria en los casos que los conflictos  afectan al bien común.

Con otras palabras Eduardo Fidanza en el diario LA NACION del pasado sábado dice: “…Más allá de su diversidad, dejan ver la huella de problemas que permanecen irresueltos, entorpeciendo la calidad de la vida social y la construcción de un sistema político más evolucionado. Las arbitrariedades del poder, el autoritarismo de la sociedad, la discriminación de la mujer, el amarillismo de la televisión, la inseguridad y la corrupción son indicios de un déficit mayor: el largo camino que aún le resta a la Argentina para pasar de un éxito deportivo circunstancial a una rutina social razonable y ordenada.”

A todo esto es lo que llamo un país sin estética….y así todo luce feo y desagradable. Esto es el kirchnerismo y así es una sector importante de nuestra sociedad que se vanagloria de ser “masa”.