Comiendo en Madrid
La capital española hace gala de su gastronomía: en sus mediodías y noches se puede encontrar una variedad de cocinas y de estilos que sólo una gran ciudad puede ofrecer.
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Si entendemos la diversidad culinaria de una ciudad como medida inherente a su cosmopolitismo socio-cultural, Madrid, la supera con excelente calificación habida cuenta de su acrisolada geografía gastronómica. Italianos, etíopes, mexicanos, vietnamitas, bangladesíes, rusos, peruanos, marroquíes, americanos y demás cocinas del mundo se aglutinan en una ciudad que gusta de salir a comer e investigar lo que se cocina más allá de sus propios fogones. Aficionados como son los españoles al buen paladar, el madrileño, cuenta con un amplio elenco de restaurantes internacionales y propios que hacen difícil la elección. Lo que si podemos es recordar que en la ciudad encontramos barrios que de una manera u otra se han especializado en un tipo de restaurante o de cocina que los distingue. Así pues, en el barrio de Lavapies es fácil encontrar restaurantes indios, pakistaníes y sudamericanos; en el centro de la ciudad y en las cercanías de la Plaza Mayor y la Puerta del Sol abundan las casas de comidas de ámbito regional: gallegos, asturianos, castellanos, andaluces y mediterráneos. En el barrio de Salamanca no es difícil encontrar excelentes restaurantes vascos, orientales o de cocina de autor, mientras que en el popular barrio de Chueca impera el diseño así como propuestas culinarias más vanguardistas. Sin embargo en el eje Castellana-Recoletos se pueden encontrar buenos asadores, y debido a su peculiar idiosincrasia mezcla de ciudad de los negocios, ocio y turismo proliferan restaurantes de comida rápida. Esta diversidad también se hace patente, ya no sólo en lo culinario, sino en la recreación de los ambientes, que mediante especialistas en interiorismo, construyen espacios y servicios que nos acercan a través de colores, elementos decorativos y mobiliarios a sitios exóticos, o simplemente confabulan con nuestros sentidos para deslizarnos en una velada agradable. Sea como fuere y al igual que otras ciudades europeas de la talla de Londres, París o Berlín, la Comunidad de Madrid, reúne restaurantes de gran calidad y diversidad. Prueba de ello es el inmenso atractivo que supone para el recién llegado, ya no solo nuestra magnífica cocina mediterránea, sino la posibilidad de elegir entre un restaurante de auténtica cocina americana, de alta cocina castellana de autor o de cualquier país del mundo que se nos venga a la cabeza o al paladar. Una rápida recorrida por este universalismo de la gastronomía nos podría lleva a destacar: Hard Rock Café Diablo Mundo La Paella de la Reina Restaurante Lanita |
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