Opinión
KRISTINA y sus extravagancias chabacanas (pero no está sola)
La arenga de Kristina del miércoles pasado dirigida exclusivamente a sus “mancebos y mancebas” puso de manifiesto su inestabilidad emocional Ver Más
Un país «en llamas»
El estado de degradación política, económica, institucional, jurídica y moral del país al que lo ha llevado el régimen cuasi-despótico instaurado por el FpV (Frente para la Victoria) de los dos Kirchner no encuentra antecedentes en la historia política argentina Ver Más
Desenredar la madeja
Hay quienes están muy ocupados y preocupados con la transición desde un sistema estatista a uno menos paternalista o directamente más cercano a la sociedad abierta. En esta nota miraré el asunto desde otro ángulo, en el sentido de sostener que la transición no es el problema sino saber hacia que meta debemos dirigirnos. Una vez comprendidos los objetivos, la transición se hará lo mejor posible, es decir, lo que permita la opinión pública al efecto de acercarse a la libertad. Pero esa transición, precisamente, se podrá hacer en pasos mayores en la medida en que se haya trabajado bien en explicar las metas Ver Más
Las caprichosas vendettas de Máximo y Cristina
“El juicio y la condena constituyen la venganza favorita de los hombres y mujeres
ESPIRITUALMENTE LIMITADOS y una especie de compensación por el hecho de haber sido mal
dotados por la naturaleza” (Friedrich Nietzsche) Ver Más
La apuesta del kirchnerismo
El análisis político y económico de Vicente Massot Ver Más
El derrumbe de las jerarquías
Cuando un gobierno comienza a transitar el final de un ciclo histórico –por razones institucionales o por motivos inherentes a su ineficiencia, o ambas cosas a la vez-, se produce un desvío paulatino en sus relaciones internas de autoridad Ver Más
Argentina y el populismo del desastre
Los gobiernos populistas tienen una gran tradición en fracasos económicos y, lamentablemente, la Argentina tiene una gran colección de gobiernos populistas Ver Más
Argentina, el laboratorio de estatismo en una nueva crisis
Una de las dificultades de las ciencias sociales está en el hecho de que los fenómenos no pueden aislarse, de modo de poder experimentar y determinar así relaciones de causa efecto de un modo empírico. La actual crisis argentina sin embargo se acerca bastante a una situación de laboratorio en la que se prueba la eficacia del autoritarismo y da como resultado muy claro un rotundo fracaso. Para entenderla hay que remontarse a lo que le pasaba al país en el año 2001 cuando se produjo la violenta crisis anterior Ver Más