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jueves 14 de febrero de 2008

El Marriott Residence Inn de Boca Raton

Presentado como un hotel, pero escondiendo la calidez del hogar propio, reúne las condiciones ideales para unas vacaciones familiares.

Boca Raton es una comunidad pequeña del condado de Palm Beach, a unos 70 kilómetros de Miami. La playa de arenas blancas tiene varias opciones para disfrutarla. Muchas de ellas están acompañadas de parques que mezclan arboledas tupidas, campos de golf, lugares de picnic y un mar azul que juega de denominador común a todas ellas.

Barrios de residencias que pertenecen a retirados que han decidido vivir una vida apacible en medio de un clima placentero tanto en verano como en invierno le dan un marco de sofisticación. Muchos de ellos alternan su vida entre el verano del norte y el invierno de la Florida. Son los “winterbirds” que migran al sur cuando el frío y la nieve rodean sus casas de la Nueva Inglaterra.

En este marco, el Marriott Residence Inn ha llevado a la perfección el concepto de la estadía prolongada, típica de la vacación familiar.

Con 120 “casitas” a la vera de un lago, equipadas con todas las comodidades del hogar propio, entrega a los huéspedes una sensación de pertenencia y comodidad que ningún hotel convencional podría empatar.

La disposición de cada “casita” es similar. Se trata de unidades de dos plantas con un living comedor, cocina completa y el “master room” con su baño en suite en el piso inferior y una habitación completa con su baño y su tocador en el piso superior.

Cada una tiene tres televisores, conexión gratuita a Internet de alta velocidad, cocina de vitrocerámica, microondas, una enorme heladera con freezer, lavavajilla y todos los utensilios necesarios para cocinar.

El living cuenta hasta con un hogar a leños… Sí, sí, en medio de la Florida. Y no es de fantasía. Es de verdad. Se puede usar en alguna noche fría de “invierno”, más como una aventura divertida que como una necesidad de calefacción.

Los cuartos están amoblados con camas “king” y un generoso escritorio de trabajo que permite mantenerse en contacto aún en esos merecidos días de descanso.

Las unidades privilegiadas dan a un lago de forma casi circular que rodea la propiedad y que sirve de marco a los jardines en los que se distribuyen cada una de las suites.

Escondido en esos jardines aparece un jacuzzi ideal para un relax al atardecer.

El área de la piscina dispone de un generoso solarium y una pileta bien cumplida de unos doce metros de largo por seis de ancho y 2.40 m de profundidad. También hay allí un jacuzzi que permite alternar la natación y el descanso. Por detrás aparece un área de “picnic” y parrillas que les permite a los huéspedes improvisar sus propios asados y comerlos en mesas dispuestas a la sombra de una abundante arboleda. En la misma área hay una cancha de básquet de dimensiones más reducidas que las profesionales que está preparada para convertirse en cancha de tenis, también más chica que las habituales, pero que sirve para despuntar el vicio de “paletear” un rato con los chicos.

El hotel dispone, para los que quieran ahorrarse el trabajo mañanero de prepararlo, un servicio de desayuno gratuito con un sistema de buffet bien completo. Muchos huéspedes optan por una media: van a buscar lo que gustan y se lo llevan a sus “casas” para disfrutarlo en familia allí.

Pese a estar rodeado de naturaleza, los más exigentes cuentan con un centro de fitness con máquinas para seguir cuidando el físico; quienes prefieren algo más natural disponen del verde para correr alrededor del lago en las luminosas mañanas del sur de la Florida.

El hotel se halla a minutos del gran centro comercial de descuentos de Sawgrass Mills y de Shoppings Malls como Boynton Beach y Boca Town Centre. Los exquisitos restaurantes de Las Olas Boulevard en Ft Lauderadale tampoco distan más de veinte minutos.

Para todos los que busquen una vacación tranquila, aunque plena de actividades en familia, desde deportivas hasta de compras, y para todos los que, al mismo tiempo, no quieran estar demasiado desconectados de sus negocios, el Marriott Residence Inn de Boca Raton ofrece una alternativa ideal: cómodo como la casa propia, con la posibilidad, para los que lo prefieran, de cocinar su propia comida con el consiguiente beneficio del ahorro, rodeado de naturaleza y con la hospitalidad propia de la cadena Marriott, es una alternativa al alcance de todos. © www.economiaparatodos.com.ar

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