PANORAMA INTERNACIONAL – La economía de los Estados Unidos creó 243.000 empleos en enero, mucho más de lo esperado, mientras que la tasa de desempleo cayó al 8,3%, un mínimo desde febrero del 2009, según cifras oficiales conocidas el viernes pasado y que sugieren que la recuperación económica de la primera potencia del mundo se consolida. Tras concluir una semana de buenas noticias, el presidente de la Fed, Ben Bernanke, alertó el jueves desde el Congreso que el país aún es vulnerable a la recesión europea y por eso garantizó que el banco central hará todo lo que tenga a su alcance para evitar cualquier posible contagio a la economía doméstica, abriendo así la puerta una vez más a nuevos estímulos. No obstante, Bernanke mostró un tono más optimista al afirmar que hay señales de que la incertidumbre que pesaba sobre las empresas estadounidenses está desapareciendo. Por otro lado, Bernanke remarcó que la principal prioridad de los Estados Unidos debía ser estabilizar las cuentas, valorando como "claramente insostenible" el actual sistema fiscal del país. Del otro lado del Atlántico, la cumbre de los países de la Unión Europea, realizada el lunes pasado en Bruselas, resultó el hecho más destacado de la semana. Así, los líderes de la eurozona, con excepción de Gran Bretaña y República Checa, acordaron los lineamientos de un fondo permanente de rescate y respaldaron un pacto diseñado por Alemania para asegurar una disciplina fiscal más estricta. Las deliberaciones se centraron en una estrategia para revivir el crecimiento y crear empleos, en momentos en que los gobiernos europeos tuvieron que recortar el gasto público y subir los impuestos. El tratado obliga a los Estados miembros a incorporar a sus legislaciones nacionales una regla que limite el déficit al 0,5% del PIB y el Tribunal de Justicia de la UE podrá imponer sanciones económicas de hasta el 0,1% a los que no incorporen esa norma en su legislación. Por otro lado, se acordó que el fondo de rescate (Mede) esté disponible a partir del 1 de julio próximo y que solo beneficie a los países que ratifiquen el pacto fiscal. Por su parte, el ministro de Finanzas y viceprimer ministro griego, Evangelos Venizelos, reconoció que la quita de la deuda en manos privadas (206.000 millones de euros) podría superar el 70%, en lugar del 50% pactado en la cumbre europea del pasado octubre. Al respecto, el ministro griego aseguró que las negociaciones con el Instituto Internacional del Finanzas (IIF), que representa a la banca que posee cerca de la mitad de la deuda helena, están "a un sólo paso" y sólo quedan "formalismos" para finalizar el acuerdo de canje de bonos. Así, la persistente crisis de la deuda griega y la incertidumbre acerca de un acuerdo con los acreedores privados mantiene al euro bajo presión. Las dudas en ese sentido llevaron al euro a operar con mucha volatilidad, entre 1,30 y 1,32 dólares, para terminar la semana cotizando al cierre en Nueva York a 1,3150 dólares.

PANORAMA ARGENTINO – Ansiedad y preocupación crecientes resultaron las emociones que caracterizaron el inicio de la semana pasada, ante el fin del complicado primer mes del año y el inicio de febrero, con la entrada en vigor del nuevo sistema impuesto por el Gobierno para controlar y regular el pago de las importaciones. La AFIP es la que autoriza, una por una, las declaraciones juradas anticipadas de importaciones (DJAI) que ahora, obligatoriamente, deben presentar las empresas que deban pagar productos o servicios comprados en el exterior. En las primeras jornadas las operaciones aprobadas fueron escasas y por montos bajos y persisten aún muchas dudas, tanto por el lado de los importadores como de los bancos. Además, el tema de las mercaderías bloqueadas en la Aduana desde hace bastante tiempo es otra incógnita preocupante, como así también el futuro de quienes comercializan productos de origen externo. Y en este nuevo escenario el MULC argentino ha perdido su condición de mercado para convertirse en un simple organismo de trámite, en este caso, de los pagos al exterior correspondientes a las autorizaciones que se vayan dando y a un tipo de cambio, aunque no fijo, direccionado por la permanente presencia del BCRA. Consecuentemente, la labor de los operadores se centraliza ahora en seguir muy de cerca las acciones del ente monetario en lugar de tener en cuenta las de la oferta y la demanda. Por esos motivos es que el volumen operado entre las entidades bancarias ha disminuido fuertemente, agregándose a ello la imposibilidad que tienen de realizar operaciones de trading. En las cinco jornadas pasadas se operó un total de USD 1.431 millones, con un promedio diario de sólo USD 286 millones, siendo esta una de las cifras más bajas de la historia cambiaria argentina. El tipo de cambio que estableció el Banco Nación para su cierre vendedor de transferencia fue de $ 4,3330, un 0,05% más bajo que el de la semana anterior. Por su parte, el BCRA tuvo que comprar unos USD 170 millones para sostener el valor del dólar, pero las reservas sólo aumentaron USD 32 millones, sumando así al cierre del viernes USD 46.701 millones. Cabe hacer notar que en la última jornada el BCRA vendió futuros para fines de los próximos dos meses a precios subsidiados, dando lugar a que los bancos le compraran y al mismo tiempo vendieran el contado, concretando así un negocio financiero muy rentable. En el mercado de futuros del Rofex, el peso/dólar quedó negociado para fin de febrero a $ 4,3600, marzo $ 4,3940, mayo $ 4,4650, junio $ 4,5040, septiembre $ 4,6500, diciembre $ 4,7700 y febrero de 2013 a $ 4,9700. En el mercado de futuros de Nueva York a un año se operó a $ 5,1813 (16%).

MOVIMIENTOS DE LAS PRINCIPALES MONEDAS FRENTE AL DÓLAR DURANTE LA SEMANA PASADA

(*) El euro y la libra esterlina se cotizan en dólares.
(**) Para el peso argentino se toman precios operados en el mercado entre bancos.

El presente informe es elaborado por ABC Mercado de Cambios. Para más información, visite: www.abcmercadodecambios.com