En nuestro país parece obvio que a la clase política le falta el nivel de calidad individual que muchas veces requieren las responsabilidades públicas que se asumen. Una notable cuota de audacia, en muchos casos, parece haberla reemplazado. Cualquiera puede desempeñarse en cualquier cargo, creen muchos.
Esto, sin embargo, no es así en otros lugares del mundo.
Por ello, creo que vale la pena describir algunos rasgos del compacto grupo de 44 personas que conforma el actual gabinete ministerial del Presidente Chen Shui-bian, de Taiwán, uno de los países de Asia más dinámicos y adelantados, con manejo de tecnologías de punta y, a la vez, con un proceso de democratización que parece estar funcionando razonablemente bien. A su ritmo, pero hacia delante.
Hay, en el gabinete de la República de Taiwán, un 100% de integrantes con títulos universitarios. Como si no pudiera ser de otra manera.
Además, el 59% de ellos le agrega importantes estudios de posgrado en las más diversas universidades de primer nivel del mundo entero.
Casi un 20% de los integrantes del gabinete llega a la función pública después de haberse desempeñado -con éxito- en el sector privado. Con enorme “café y esquina”, entonces, acerca de cómo funciona el sector real de la economía.
El 81% de los miembros del gabinete taiwanés son varones; el 19%, en cambio, mujeres.
La edad promedio de todos los miembros del gabinete en cuestión es de 53,8 años. La de los miembros del mismo que son mujeres, de solo 41 años. El miembro más joven de todo el gabinete, una mujer, tiene solo 35 años. El más viejo de todos, un varón, 69 años.
Toda una notable radiografía, para envidiar, particularmente ante las bien contundentes realidades vernáculas que difieren ciertamente respecto del perfil que hemos descripto que corresponde a lo que ocurre en Taiwán. © www.economiaparatodos.com.ar
Emilio Cárdenas es ex Representante Permanente de la Argentina ante la Organización de las Naciones Unidas. |