Una herencia con beneficio de inventario
Sólo algún despistado puede creer que en pocos días estaremos inmersos en una elección presidencial, común y corriente. Porque no es así. Lo que vamos a decidir es algo inusual y trascendente: elegir si queremos ser un pueblo libre y respetuoso o convertirnos en una masa de gente sumisa y confusa, manipulable por cualquier advenedizo que usurpe el poder político.
BENEFICIO DE INVENTARIO
Cualquiera sea quien triunfe: Macri, Massa o Scioli (en menor medida) tendrán que aceptar la herencia del matrimonio Kirchner “con beneficio de inventario”. Lo cual significa deslindar responsabilidades por las graves falsedades, distorsiones y déficits que dejará la gestión de Cristina y su “asistente económico Kicillof”: desorden fiscal de magnitud incalculable; crisis social con relajamiento moral; y caos monetario para bancar la ineptocracia enquistada en el Gobierno.
DESORDEN FISCAL
Los resultados que deja el promocionado “modelo” son abrumadores. En pocas cifras estos son los frutos del proyecto nacional y popular:
a) un desmesurado gasto público de $ 2,35 billones; b) el mayor déficit de la historia después del de Isabelita y la hiper de Alfonsín; c) una balanza comercial negativa de – 3 % con cepo cambiario; d) una dotación de 3,9 millones de empleados públicos, muchos ocupados en tareas inútiles; e) despilfarro de $ 145.000 millones en Futbol para todos, Aerolíneas, Flota presidencial, propaganda, suntuosidades inútiles y sobreprecios provocados por la corrupción; f) brutal fiscalidad para financiar un Estado que arrebata $ 22.104 mensuales en promedio por familia; g) un ingreso de bolsillo de tan sólo $ 8.800 por mes para el 76 % de la población ocupada.
CRISIS SOCIAL
El balance social no es menos desalentador. En efecto, después de 12 años de fantasiosos anuncios tenemos: a) una explosiva pobreza en el 30 % de la población total; b) desaprensión oficial por la educación con el 48 % de alumnos que no terminan el primario/secundario; c) una generalizada ignorancia en el 52 % de escolares graduados que no comprenden los textos que leen, incluyendo a muchos aspirantes a cargos de magistrados. d) gigantesca masa humana de 13.880.000 individuos que viven de las rentas del Estado; e) reducida minoría de 9.180.000 personas que perciben salarios e ingresos de fuente privada; f) un insostenible régimen de subsidios que por cada uno que produce bienes útiles otras 2,51 personas cobran sueldos y pensiones, mientras que en países adelantados esa relación es de 1,18 individuos.
CAOS MONETARIO.
La demolición del poder de compra del dinero con el eslogan de la soberanía monetaria sólo se parangona con las hiperinflaciones de Ricardo Alfonsín y Carlos Menem en 1989 y 1990 respectivamente. Queda demostrada por: a) la emisión anual de billetes sin control que llegan al 46,5 %; b) una inflación anual verdadera del 27,9 % calculada por The Billion Prices Project del MIT, en Boston, en lugar del 13 % como informa mendazmente el INDEC;
c) patrimonio neto negativo de un Banco Central en situación de bancarrota; d) escasas reservas de libre disponibilidad en dólares contantes y sonantes por sólo u$s 5.724 millones que apenas alcanzan para pagar el Boden 2015; e) imprudente y sospechoso pago de u$s 9.277 millones por intereses de las Lebac; f) Deuda pública reconvertida en deuda interna que al cambio oficial asciende a u$s 283.024 millones; g) increíble suma de dólares privados atesorados fuera del sistema económico por u$s 248.850 millones sin que logren inspirar confianza para que retornen a la patria.
LOS PRIMEROS 100 DÍAS.
Les guste o les desagrade, estén anoticiados por sus asesores o desinformados por ellos, los tres candidatos presidenciales Macri, Massa y Scioli, tendrán delante de su conciencia e inteligencia sólo tres caminos para elegir la ruta hacia el éxito o el fracaso.
El tiempo del que dispondrán no puede estirarse más allá de 100 días: o ajustan la herencia recibida del gobierno de Cristina y Kicillof con medidas de shock; o la ajustan con medidas dilatorias, gradualistas, que terminarán enredándolos más que ahora; o encaran un serio y bien concebido plan de saneamiento fiscal. No tendrán otras opciones al alcance de sus manos.
EL PLAN DE SANEAMIENTO FISCAL
Esta tercera opción, no mencionada por ningún candidato ni siquiera explicada o sugerida por algunos de sus asesores económicos y futuros ministros de economía, es la confección de un Plan de Saneamiento Fiscal.
El mismo contempla el anuncio y la sanción de medidas globales y simultáneas siguiendo los lineamientos magistrales de Jacques Rueff y Louis Armand que se denominaron: “Sortir l’impasse budgetaire sans augmentar l’impôst” y luego, “Examiner et recommander des mesures pour éliminer toutes les situations de fait ou de droit qui constituent des obstacles et barrières à l’expansion de l’initiative privée en France”.
Este plan, genialmente armado por dos brillantes economistas, contemplaba: un inventario exhaustivo de obstáculos, rigideces y desequilibrios de la economía de Francia; disposiciones para eliminar la esclerosis y bloqueos en el seno del sistema económico; medidas para poner fin a las distorsiones y mendacidades de costos y precios; eliminación de las desigualdades que impidan el crecimiento armonioso de las economías
regionales; reforma sustancial de toda la administración pública; suministro de información estadística verdadera; remediar las insuficiencias de la formación docente y mejoramiento de la instrucción escolar primaria y secundaria; medidas para neutralizar las mentalidades y comportamientos indiferentes u hostiles al mejoramiento económico.
EN QUE CONSISTE EL PLAN DE SANEAMIENTO FISCAL
El Plan de saneamiento fiscal consiste en un conjunto armónico y coherente de medidas globales y simultáneas, que provocan efectos de impacto-inmediato y otros efectos-diferidos que inducen una modificación de las motivaciones y conductas para conseguir la expansión de la economía nacional.
Se trata de pasar de una ECONOMÍA INTERFERIDA, trabada con improvisaciones, reglamentos, trámites, controles y órdenes contradictoras de funcionarios ineptos a otra ECONOMIA ESPONTÁNEA, autónoma de la política, ordenada y predecible, que respete la iniciativa privada y establezca reglas justas, sobrias y estables, de efectivo cumplimiento para todos los agentes económicos.
DONDE SE APLICÓ
Con diferentes variantes, ajustadas a las condiciones particulares de cada país y a cada época histórica, el Plan de saneamiento fiscal se aplicó en los siguientes países con total y absoluto éxito:
En 1949, el Plan Dodge impuesto por el legendario general Mc Arthur al imperio japonés, para salir del feudalismo económico y pasar a un sistema de empresas libres coordinados por ”Keiretsus”. En 1952, la Alemania a cargo de Ludwig Erhard para salir de la economía centralizada en el Estado nacional-socialista y pasar a una Economía de mercado con responsabilidad social. En 1955, el brillante hacendista Luigi Einaudi que permitió salir del corporativismo fascista e impedir la expansión soviética que amenazaba el norte de Italia desde la Austria ocupada por el ejército rojo. En 1958, Jacques Rueff y Louis Armand que permitieron al general Charles De Gaulle salir del decadente socialismo francés para pasar a la vigorosa Vª République francaise. En 1973, el ministro español Laureano López Rodó que hizo posible zafar de la economía nacional-sindicalista del franquismo de postguerra para iniciar una apertura económica hacia Europa y el mundo. En 1990, Helmuth Köhl el genial canciller alemán que tuvo que digerir el régimen totalitario de Pankow y unificar una economía de doble comando entre la Alemania Federal y la Alemania comunista. En 2004, Wladimir Putin que, inteligentemente, dispuso liquidar la Glásnot-Perestroika porque consolidaba el sistema económico del socialismo marxista para entrar en una economía moderna, libre y abierta a la competencia y cooperación internacional.
Los tres candidatos con mayores posibilidades de llegar a la presidencia: Mauricio Macri, Sergio Massa o Daniel Scioli ¿tendrán la suficiente capacidad intelectual, el espíritu patriótico, un adecuado liderazgo político y las necesarias agallas para hacer algo parecido en esta Argentina que está medrando en un indignante y deplorable cono de sombra?
Antonio I. Margariti